{"id":1732,"date":"2020-06-17T20:07:35","date_gmt":"2020-06-17T20:07:35","guid":{"rendered":"http:\/\/tecuentoalgo.com\/?p=1732"},"modified":"2020-06-17T20:07:37","modified_gmt":"2020-06-17T20:07:37","slug":"asnos-estupidos-isaac-asimov","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/asnos-estupidos-isaac-asimov\/","title":{"rendered":"Asnos est\u00fapidos – Isaac Asimov"},"content":{"rendered":"
Naron, de la longeva raza rigeliana, era el cuarto de su estirpe que llevaba los anales gal\u00e1cticos. Ten\u00eda en su poder el gran libro que conten\u00eda la lista de las numerosas razas de todas las galaxias que hab\u00edan adquirido el don de la inteligencia, y el libro, mucho menor, en el que figuraban las que hab\u00edan llegado a la madurez y pose\u00edan m\u00e9ritos para formar parte de la Federaci\u00f3n Gal\u00e1ctica. En el primer libro hab\u00edan tachado algunos nombres anotados con anterioridad: los de las razas que, por el motivo que fuere, hab\u00edan fracasado. La mala fortuna, las deficiencias bioqu\u00edmicas o biof\u00edsicas, la falta de adaptaci\u00f3n social se cobraban su tributo. Sin embargo, en el libro peque\u00f1o nunca se hab\u00eda tenido que tachar ninguno de los nombres anotados.<\/p>\n
En aquel momento, Naron, enormemente corpulento e incre\u00edblemente anciano, levant\u00f3 la vista al notar que se acercaba un mensajero.<\/p>\n
-Naron -salud\u00f3 el mensajero-. \u00a1Gran Se\u00f1or!<\/p>\n
-Bueno, bueno, \u00bfqu\u00e9 hay? Menos ceremonias.<\/p>\n
-Otro grupo de organismos ha llegado a la madurez.<\/p>\n
-Estupendo, estupendo. Hoy en d\u00eda ascienden muy aprisa. Apenas pasa a\u00f1o sin que llegue un grupo nuevo. \u00bfQui\u00e9nes son?<\/p>\n
El mensajero dio el n\u00famero clave de la galaxia y las coordenadas del mundo en cuesti\u00f3n.<\/p>\n
-Ah, s\u00ed -dijo Naron- lo conozco.<\/p>\n
Y con buena letra cursiva anot\u00f3 el dato en el primer libro, trasladando luego el nombre del planeta al segundo. Utilizaba, como de costumbre, el nombre bajo el cual era conocido el planeta por la fracci\u00f3n m\u00e1s numerosa de sus propios habitantes.<\/p>\n
Escribi\u00f3, pues: La Tierra.<\/p>\n
-Estas criaturas nuevas -dijo luego- han establecido un r\u00e9cord. Ning\u00fan otro grupo ha pasado tan r\u00e1pidamente de la inteligencia a la madurez. No ser\u00e1 una equivocaci\u00f3n, espero.<\/p>\n
-De ning\u00fan modo, se\u00f1or -respondi\u00f3 el mensajero.<\/p>\n
-Han llegado al conocimiento de la energ\u00eda termonuclear, \u00bfno es cierto?<\/p>\n
-S\u00ed, se\u00f1or.<\/p>\n
-Bien, ese es el requisito -Naron solt\u00f3 una risita-. Sus naves sondear\u00e1n pronto el espacio y se pondr\u00e1n en contacto con la Federaci\u00f3n.<\/p>\n
-En realidad, se\u00f1or -dijo el mensajero con renuencia-, los observadores nos comunican que todav\u00eda no han penetrado en el espacio.<\/p>\n
Naron se qued\u00f3 at\u00f3nito.<\/p>\n
-\u00bfNi poco ni mucho? \u00bfNo tienen siquiera una estaci\u00f3n espacial?<\/p>\n
-Todav\u00eda no, se\u00f1or.<\/p>\n
-Pero si poseen la energ\u00eda termonuclear, \u00bfd\u00f3nde realizan las pruebas y las explosiones?<\/p>\n
-En su propio planeta, se\u00f1or.<\/p>\n
Naron se irgui\u00f3 en sus seis metros de estatura y tron\u00f3:<\/p>\n
-\u00bfEn su propio planeta?<\/p>\n
-Si, se\u00f1or.<\/p>\n
Con gesto pausado, Naron sac\u00f3 la pluma y tach\u00f3 con una raya la \u00faltima anotaci\u00f3n en el libro peque\u00f1o. Era un hecho sin precedentes; pero es que Naron era muy sabio y capaz de ver lo inevitable, como nadie, en la galaxia.<\/p>\n
-\u00a1Asnos est\u00fapidos! -murmur\u00f3.<\/p>\n
FIN<\/p>\n
Naron, de la longeva raza rigeliana, era el cuarto de su estirpe que llevaba los anales gal\u00e1cticos. Ten\u00eda en su poder el gran libro que conten\u00eda la lista de las numerosas razas de todas las galaxias que hab\u00edan adquirido el don de la inteligencia, y el libro, mucho menor, en el que figuraban las que […]<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":1733,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[10,19],"tags":[],"class_list":{"0":"post-1732","1":"post","2":"type-post","3":"status-publish","4":"format-standard","5":"has-post-thumbnail","7":"category-cuentos-cortos","8":"category-los-mejores-cuentos-clasicos","9":"czr-hentry"},"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/1732","targetHints":{"allow":["GET"]}}],"collection":[{"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=1732"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/1732\/revisions"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/media\/1733"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=1732"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=1732"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=1732"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}