<\/em> Una vieja historia de antipat\u00eda<\/p>\n

Esta es una historia real, los \u00faltimos hechos narrados aqu\u00ed se sucedieron en 2020 durante la pandemia que asol\u00f3 al mundo, por solicitud de los sobrevivientes se han cambiado algunos nombres. Por respeto a los difuntos, el resto se relata tal como ocurri\u00f3.<\/em><\/p>\n

 <\/em><\/p>\n

                                                                    <\/strong><\/p>\n

                                                        El espejo del ba\u00f1o<\/strong><\/p>\n

 <\/strong><\/p>\n

En recuerdo de mis profesores de piano, guitarra, teclado electr\u00f3nico y tambi\u00e9n los de la materia Educaci\u00f3n Musical de la secundaria, que hicieron lo que pudieron.<\/em><\/strong><\/p>\n

 <\/em><\/strong><\/p>\n

C<\/span>on el Tat\u00e1 LoBronco coincidimos un a\u00f1o en la Escuela Militar de Aeron\u00e1utica, \u00e9l cursando el \u00faltimo a\u00f1o, al momento en que mis compa\u00f1eros y yo nos adentr\u00e1bamos a la vida de internado de los cadetes, al cumplimiento estricto de horarios y al r\u00e9gimen militar, pero siempre con nuestra mente puesta en ser aviadores alg\u00fan d\u00eda.<\/p>\n

Si bien casi no tuvimos contacto con \u00e9l al principio, con el pasar de los d\u00edas ir\u00edamos conoci\u00e9ndolo, como lo hicimos con casi todos ellos y enter\u00e1ndonos de su personalidad tan particular. M\u00e1s tarde compartir\u00edamos algunas actividades de la vida del cadete, como lo son la instrucci\u00f3n militar, las guardias, hasta la propia convivencia de solo un a\u00f1o, pero que nos hizo sentir su f\u00e9rreo car\u00e1cter.<\/p>\n

En aquellos inicios no esper\u00e1bamos mucho m\u00e1s que de nosotros mismos, de lo que pudi\u00e9ramos ir aprendiendo y de la experiencia que pudi\u00e9ramos acumular en el corto tiempo que llev\u00e1bamos desde nuestro ingreso.<\/p>\n

Su simpat\u00eda no era lo relevante en su persona y menos hacia nosotros \u201clos reci\u00e9n entrados\u201d; tampoco era que lo esper\u00e1bamos. Pero al menos un poco de cortes\u00eda, de amabilidad, de camarader\u00eda. Nada de eso. \u00a1Un tipo \u201cduro\u201d de los de verdad!<\/p>\n

Nuestra Fuerza A\u00e9rea tiene pocas unidades y no resulta extra\u00f1o coincidir con compa\u00f1eros o conocidos en alguna de ellas. Los a\u00f1os pasaron y se dio tambi\u00e9n que comparti\u00e9ramos el mismo destino en el \u00e1rea de Carrasco, pero sin tener ninguna relaci\u00f3n de dependencia, o de trabajo, o m\u00e1s bien, ninguna relaci\u00f3n, a lo sumo alg\u00fan saludo obligatorio en caso de un cruce ocasional, o hasta accidental, en lo particular trataba de evitarlo.<\/p>\n

Ya no los a\u00f1os, sino que el tiempo entero hab\u00eda pasado y nos hab\u00eda vuelto a encontrar. Esta vez retirados de la actividad aeron\u00e1utica, veteranos, peinando canas (aunque \u00e9l las pein\u00f3 desde muy joven) y que por iniciativa de algunos de sus compa\u00f1eros de promoci\u00f3n, hicimos una reuni\u00f3n y cena de camarader\u00eda compartida. Ellos, que hab\u00edan sido \u201cnuestros\u201d clases y nosotros, que hab\u00edamos sido \u201csus\u201d aspirantes sent\u00edamos cierta familiaridad, algo as\u00ed como una complicidad con muchas historias en com\u00fan; en definitiva fue de ellos que aprendimos a convivir y a sobrevivir la vida de pupilos en un instituto de ense\u00f1anza militar. La relaci\u00f3n entre los integrantes de ambas tandas, m\u00e1s cercana o m\u00e1s alejada, con m\u00e1s o poca confianza, entre unos y otros, siempre fue muy llevadera, cordial y hasta de m\u00e1s cercan\u00eda que con otras promociones, surgiendo en muchos casos una amistad que fue m\u00e1s all\u00e1 de la camarader\u00eda.<\/p>\n

Es as\u00ed que el Tat\u00e1 LoBronco entre saludos, conversaciones, risas y alguna que otra \u201cchanza\u201d que se le hizo, pas\u00f3 desapercibido y fue uno m\u00e1s en la reuni\u00f3n sin que nadie nombrara viejas y repetidas historias de las que, seguramente, nadie quer\u00eda acordarse en aquellos momentos de solaz esparcimiento.<\/p>\n

\u201cRecuerdan cuando el Enano Soria\u2026\u201d \u2013dijo uno, tan alto que pr\u00e1cticamente todos los all\u00ed presentes, hicimos un silencio sepulcral porque sab\u00edan, o se imaginaban lo que ven\u00eda\u2013, \u201c\u2026 que mientras el \u201ccoiffeur\u201d le cortaba el pelo  \u2013era el mismo peluquero de la B.M. y A. que se hac\u00eda llamar \u201ccoiffeur\u201d\u2013, le propuso ponerle un producto que matizar\u00eda sus canas, pero sin llegar a te\u00f1irlas.<\/em><\/p>\n

El Enano como todos sabemos, muy r\u00e1pido en su reaccionar, le sugiri\u00f3 al autoproclamado \u201ccoiffeur\u201d que le hiciera la propuesta del matizado de canas al capit\u00e1n LoBronco, cuando tuviera la oportunidad: \u201c\u2026porque LoBronco, que es compa\u00f1ero m\u00edo, \u2013le dec\u00eda el Enano\u2013, lo conozco bien, es t\u00edmido y retra\u00eddo y no se va a animar a preguntarle. \u00a1Prop\u00f3ngaselo!<\/em><\/p>\n

D\u00edas despu\u00e9s el autoproclamado \u201ccoiffeur\u201d se aperson\u00f3 al Enano y cabizbajo le dijo: \u201cMi capit\u00e1n, el capit\u00e1n LoBronco me sancion\u00f3 de arresto a rigor por proponerle hacerle la tinta en su cabello.\u201d<\/em><\/p>\n

Historia conocida pero caus\u00f3 que las risas fueran por unanimidad, al decir de don Ver\u00eddico.<\/em><\/p>\n

Y continu\u00f3: \u201cPor supuesto que la sanci\u00f3n no corri\u00f3, el Enano Soria habl\u00f3 con el Tat\u00e1 LoBronco, al que le cost\u00f3 aflojar, pero que al fin termin\u00f3 por dejarla en libertad\u201d.<\/em><\/p>\n

Las historias y cuentos, jolgorio y risas en el c\u00e1lido ambiente de la peque\u00f1a barbacoa \u201cC3\u201d, traspasaron el umbral de la medianoche de aquel fr\u00edo d\u00eda 14 de agosto de 2018.<\/p>\n

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .<\/p>\n

Un par de a\u00f1os m\u00e1s tarde. La pandemia se hab\u00eda establecido y asolaba al mundo.<\/p>\n

Luego de una jornada agotadora, pens\u00e9 que me merec\u00eda un buen descanso y sin m\u00e1s rodeos beb\u00ed una taza de leche caliente y me fui a la cama.<\/p>\n

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .<\/p>\n

Estaba yo con otro grupo de gente, la mayor\u00eda eran caras desconocidas, en un almuerzo en un club campestre. No recuerdo ni como llegu\u00e9 al lugar, pero que sorpresa que me llev\u00e9 al encontrarme con mi querido amigo el \u201cEnano\u201d Soria, que luego del abrazo que nos dimos, socarronamente me dice: \u201cMir\u00e1 que vine con el Tat\u00e1 LoBronco\u201d. Me re\u00ed al escucharlo, porque el Enano siempre supo de la animadversi\u00f3n que algunos ten\u00edamos para con su antip\u00e1tico compa\u00f1ero, pero conoci\u00e9ndolo, ya que el Enano no da un paso sin antes pensar en alguna broma, directamente no le di cr\u00e9dito.<\/em><\/p>\n

El ambiente en que est\u00e1bamos era totalmente at\u00edpico a ambos y salvo nosotros dos, el resto de los all\u00ed presentes eran totales desconocidos para m\u00ed y luego Soria me dir\u00eda que tambi\u00e9n para \u00e9l, as\u00ed que resumiendo: \u00a1Est\u00e1bamos en medio de desconocidos!<\/em><\/p>\n

De repente, de un grupo que se desarma a las carcajadas veo aparecer la inconfundible cara del Tat\u00e1 LoBronco en evidente trayectoria hacia adonde est\u00e1bamos con el Enano Soria, lo cual gener\u00f3 en mi un:<\/em><\/p>\n

\u2013 \u00a1Noooo!\u201d \u2013que le grit\u00e9 al o\u00eddo al Enano y continu\u00e9: \u2013 \u00a1Pens\u00e9 que me lo hab\u00edas dicho en broma!\u201d<\/em><\/p>\n

No tuvimos m\u00e1s remedio que saludarnos con un seco \u00a1Hola!, y un muy corto apret\u00f3n de manos.<\/em><\/p>\n

\u2013\u00bfVamos a sentarnos? \u2013dijo el Enano, tomando el respaldo de la silla de cabecera y apart\u00e1ndola de la mesa. <\/em><\/p>\n

Me sent\u00e9 a un lado del Enano y frente a m\u00ed, el Tat\u00e1.<\/em><\/p>\n

\u00a1Qu\u00e9 me espera! \u2013me dije para mis adentros. M\u00e1s que nada pensando en que el almuerzo ni siquiera hab\u00eda comenzado a servirse. Por suerte (para mi), la conversaci\u00f3n, al comienzo, vers\u00f3 sobre temas que le concern\u00edan a ambos y por unos instantes qued\u00e9 fuera de la charla.<\/em><\/p>\n

Mientras ellos opinaban sobre no se que cosa, record\u00e9 comentarles mi \u00faltimo logro y que era seguro no lo sab\u00edan. En ese momento comenzaban a servir la entrada de un rico plato de fiambres con ensalada rusa. Aprovech\u00e9 el moment\u00e1neo silencio para intervenir y cambiar el tema y dije:<\/em><\/p>\n

\u2013Saben\u2026, acabo de terminar mi \u201cespecializaci\u00f3n en tri\u00e1ngulo\u201d \u2013r\u00e1pidamente me di cuenta de que solo con eso no me entender\u00edan y agregu\u00e9\u2013, mejor lo digo por  extenso: \u201cEspecializaci\u00f3n en el instrumento de percusi\u00f3n idi\u00f3fono llamado Tri\u00e1ngulo\u201d\u2026<\/em><\/p>\n

Me quedaron mirando como cuestion\u00e1ndome, a lo que continu\u00e9:<\/em><\/p>\n

\u2013Esto me permitir\u00e1 tocar en orquestas sinf\u00f3nicas y filarm\u00f3nicas, o en aquellas obras de m\u00fasica culta en que se requiera el instrumento; he practicado mucho y para ello pongo alguna obra en el equipo de audio \u2013en el que he invertido bastante para que reproduzca el mejor sonido que se pueda escuchar\u00ad, aclar\u00e9\u2013 y me siento en la sala donde tomo mi tri\u00e1ngulo y su baqueta y espero ansiosamente el momento de intervenir en la pieza musical. As\u00ed lo hago asiduamente, al son de grandes orquestas como la \u201cLondon Philarmonic Orchestra\u201d, la \u201cDresden Staatskapelle\u201d, o la \u201cBoston Symphony Orchestra\u201d interpretando obras diversas tales como \u201cEl Lago de los Cisnes\u201d de Chaikovski, la \u201cSinfon\u00eda en Re Menor N\u00b0 1 Tit\u00e1n\u201d de Gustav Mahler, o \u201cConcierto para piano No.1\u201d de Liszt, donde el tri\u00e1ngulo se luce en el 3er. Movimiento de esta obra, como instrumento solista. Esto que les voy a contar ahora que quede entre nosotros\u2026, a veces me safo y pongo alg\u00fan tema de Santana y lo acompa\u00f1o\u2026 \u2013y agregu\u00e9\u2013, \u00a1Ese ser\u00eda un verdadero sue\u00f1o a ver cumplido!<\/em><\/p>\n

Mientras nos dispon\u00edamos a comer observ\u00e9 sus caras de soslayo; de asombro, la del Enano Soria y el imperturbable e incambiable rostro del Tat\u00e1 LoBronco, que ya enfilaba hacia su bigotuda boca, el tenedor con un trozo de jam\u00f3n coronado con la rica ensalada. Ninguno de los dos hizo alg\u00fan comentario, por lo que continu\u00e9:<\/em><\/p>\n

\u2013Todo empez\u00f3 desde muy peque\u00f1o, en Durazno, cuando con cinco a\u00f1os tuve que integrar la \u201corquestita\u201d de Jardinera y la maestra me dio el tri\u00e1ngulo. Hoy pasados los a\u00f1os, ser\u00e9 sincero, yo quer\u00eda la pandereta, pero mi destino ya estaba marcado \u2013y continu\u00e9\u2013, a\u00f1os m\u00e1s tarde me enviaron a estudiar piano con la profesora Lila Casavilla de Huber, la que casualmente tambi\u00e9n hab\u00eda sido profesora de mi madre. Llegu\u00e9 a dar los ex\u00e1menes de primer, segundo, tercer y cuarto a\u00f1o, correspondientes, con el profesor Hugo Balls en el local de la Coral de Durazno pero, aunque iba viento en popa, definitivamente ese no ser\u00eda el instrumento que me dar\u00eda a mi y a mis allegados m\u00e1s satisfacciones que las logradas hasta ese momento, por lo que no llegu\u00e9 a comenzar el quinto a\u00f1o y mi carrera como pianista culmin\u00f3 ah\u00ed.<\/em><\/p>\n

C\u00f3mo buen orador, bien aprendido, miraba cada tanto a ambos, que en el caso del Enano Soria su cara mostraba un gesto inc\u00f3modo de una sonrisa que le dificultaba masticar la comida, mientras que el Tat\u00e1 LoBronco con su cabeza gacha y sus ojos enfrentados al plato, manten\u00eda imp\u00e1vida la rigidez de su cara, cosa que siempre lo caracteriz\u00f3.<\/em><\/p>\n

No mucho despu\u00e9s de eso, mis mayores \u2013viendo la necesidad de ocupar mis infantiles horas ociosas\u2013, terminaron por encontrar otra actividad en que, aprovechando que una profesora de guitarra se hab\u00eda mudado al lado de mi casa, comenc\u00e9 mis estudios de vihuela espa\u00f1ola. Seis meses m\u00e1s tarde abandon\u00e9 esos estudios debido al gran dolor que me causaba en las yemas de mis dedos al apretar las cuerdas para conformar los acordes. Eso fue para mi, literalmente, una verdadera tortura la que, luego de varios intentos frustrados, por fin logr\u00e9 convencer a quienes hab\u00edan puesto en mi toda la esperanza de tener un gran guitarrista en la familia. Ese a\u00f1o fue el \u00faltimo que viv\u00ed que en la ciudad de San Pedro del Durazno; a fines del verano siguiente mi familia y yo nos mudar\u00edamos a la Capital.<\/em><\/p>\n

Not\u00e9 que por primera vez el Tat\u00e1 LoBronco me dirig\u00eda una mirada y ya no vi su rostro tan r\u00edgido y serio, hasta llegu\u00e9 a notar una cierta y leve sonrisa, me imagin\u00e9 que tal vez pensando en que le estaba tomando el pelo, o algo as\u00ed. En fin, eso me hizo sentir un poco m\u00e1s liberado, m\u00e1s alegre que minutos antes; estaba logrando lo que para m\u00ed, era casi un milagro: hacer que el Tat\u00e1 tambi\u00e9n se sintiera c\u00f3modo.<\/em><\/p>\n

Luego de una gui\u00f1ada c\u00f3mplice de Soria continu\u00e9 con mi historia\u2026<\/em><\/p>\n

\u2013Muchos a\u00f1os hab\u00edan pasado cuando se me ocurri\u00f3 comprar un \u00f3rgano electr\u00f3nico. Me anot\u00e9 un curso para aprender a tocar el teclado, hac\u00eda las tareas domiciliarias que me ordenaba la profesora y concurr\u00eda dos o tres veces a clases presenciales, donde deb\u00eda exponer mis adelantos frente a ella. El avance era muy lento y el m\u00e9todo no ten\u00eda nada que ver con lo que yo me hab\u00eda imaginado, o recordaba de mis experiencias anteriores. Termin\u00e9 abandonando con mis estudios y vendiendo el \u00f3rgano a un pastor de una iglesia evang\u00e9lica.<\/em><\/p>\n

Hice una pausa y luego referenci\u00e9:<\/em><\/p>\n

\u2013Mi hom\u00f3nimo colombiano, de segundo apellido M\u00e1rquez, escritor ya fallecido, en un momento de su vida, hizo una especie de retrospecci\u00f3n personal del tiempo que dedicaba a esa tarea, escribi\u00f3: \u201cM\u00e1s bien voy a dedicarme a la m\u00fasica. Ya comenc\u00e9 a estudiarla con Alejo Carpentier y Maurice Ohana, en Par\u00eds, y ahora me voy para Barranquilla y me pongo a escribir un concierto para tri\u00e1ngulo y orquesta. Es que al pobre tri\u00e1ngulo lo tienen fregado. \u00bfHa visto una partitura para tri\u00e1ngulo? Es una vaina en que se pasan p\u00e1ginas y p\u00e1ginas y, de golpe, tin, triste. Yo voy a componer una obra que constituya una rehabilitaci\u00f3n del personaje m\u00e1s olvidado de la orquesta; lo pongo al frente del escenario, antes que todos los dem\u00e1s instrumentos, enciendo las luces y hago que la orquesta entera trabaje para el tri\u00e1ngulo.\u201d<\/em><\/p>\n

\u2013\u00a1Pues estoy pens\u00e1ndolo seriamente, pues c\u00f3mo Garc\u00eda M\u00e1rquez no pudo cumplir con su deseo, me ha dejado la oportunidad de intentarlo yo!<\/em><\/p>\n

Fue decir esto \u00faltimo y de no creer, el Tat\u00e1 LoBronco empez\u00f3 a toser atragantado con la buseca de mondongo que en ese momento com\u00eda; el Enano Soria, hasta tuvo que situarse detr\u00e1s de \u00e9l y darle unas palmadas en la espalda para que se aliviara.<\/em><\/p>\n

Ya recuperado, con la cara colorada y los bigotes erizados, me dijo:<\/em><\/p>\n

\u2013 \u00a1Me hiciste re\u00edr y me ator\u00e9!<\/em><\/p>\n

\u2013 \u00a1Esa era la idea! \u2013le contest\u00e9.<\/em><\/p>\n

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .<\/p>\n

El d\u00eda agotador que hab\u00eda pasado la jornada anterior hizo que me acostara temprano y temprano me hab\u00eda despertado. Por las rendijas de la cortina ya se ve\u00eda que estaba clareando y el solo hecho de pensar en preparar un rico mate amargo me hizo saltar de la cama. Lo hice lo m\u00e1s silencioso que pude para no despertar a la familia.<\/p>\n

Solo en el ba\u00f1o y vi\u00e9ndome al espejo mientras me cepillaba los dientes, me vinieron a la mente las im\u00e1genes del sue\u00f1o que hab\u00eda tenido durante la noche\u2026 Al reaccionar que solo hab\u00eda un sue\u00f1o, no pude contener el ataque de risa que me acometi\u00f3\u2026<\/p>\n

No les cuento el deplorable estado en que qued\u00f3 el espejo del ba\u00f1o.<\/p>\n

Junio de 2020.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

               Una vieja historia de antipat\u00eda Esta es una historia real, los \u00faltimos hechos narrados aqu\u00ed se sucedieron en 2020 durante la pandemia que asol\u00f3 al mundo, por solicitud de los sobrevivientes se han cambiado algunos nombres. Por respeto a los difuntos, el resto se relata tal como ocurri\u00f3.   […]<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":2199,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[3,10,31],"tags":[],"class_list":{"0":"post-2198","1":"post","2":"type-post","3":"status-publish","4":"format-standard","5":"has-post-thumbnail","7":"category-blog","8":"category-cuentos-cortos","9":"category-cuentos-de-gabriel-garcia","10":"czr-hentry"},"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/2198","targetHints":{"allow":["GET"]}}],"collection":[{"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=2198"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/2198\/revisions"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/media\/2199"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=2198"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=2198"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/tecuentoalgo.com\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=2198"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}