Punto clave
- Un consumo de tomate elevado redujo de modo significativo el riesgo de cáncer de próstata (CP).
- La ingesta total de tomate cocinado y salsas de tomate mostró relaciones de respuesta a la dosis con el riesgo de CP.
- No se halló ninguna asociación en el caso de riesgo de CP en estadio avanzado.
Por qué es importante
- La protección del CP se añade a los muchos beneficios del consumo de tomate para la salud.
Diseño del estudio
- Se trataba de un metanálisis en el que se incluyeron 30 estudios idóneos (24 222 casos de cáncer de próstata y 260 461 participantes) identificados de PubMed, Web of Science y la biblioteca Cochrane hasta abril de 2017.
- Financiación: no se reveló ninguna.
Resultados clave
- Un consumo total de tomate elevado (riesgo relativo [RR]: 0,81; P = 0,001), de tomate cocinado y salsas de tomate (RR: 0,84; P = 0,029) y de alimentos con tomate (RR: 0,84; P = 0,030) redujeron de modo significativo el riesgo de CP.
- El consumo de tomate crudo (P = 0,487) y de pizza (P = 0,850) no se asoció con el riesgo de CP.
- El consumo total no se asoció con la enfermedad en estadio avanzado (P = 0,113).
- Se observó una relación significativa de la respuesta a la dosis con el riesgo de CP en el caso de los tomates cocinados y las salsas de tomate (Plineal < 0,001) y el tomate crudo (Plineal = 0,037).
Limitaciones
- Los tipos de tomate y preparados consumidos variaban entre los estudios.
Fuente: univadis