Un papá que jamás ríe

Los judíos, los cristianos y los musulmanes veneran a la misma divinidad.
Es el dios de la Biblia, que responde a tres nombres, Yahvé, Dios a secas
y Alá, según quién lo llame. Los judíos, los cristianos y los musulmanes se
matan entre sí, diciendo que obedecen sus órdenes.
En otras religiones, son o han sido muchos. Numerosos olimpos hay o hubo
en Grecia, en México, en Perú, en Japón, en China. Y sin embargo , el Dios
de la Biblia es celoso.
¿Celoso de quién? ¿Por qué le preocupa tanto la competencia, si Él es el
único y verdadero?
No te postrarás ante ningún otro dios, pues Yahvé se llama Celoso, es un
Dios celoso.(Éxodo)
¿Por que castiga en los hijos, y por varias generaciones, la infidelidad de
los padres?
Yo, Yahvé, tu Dios, castigo la iniquidad de los padres en los hijos hasta
la tercera y cuarta generación de los que me odian.(Éxodo)
¿ Por qué está siempre tan inseguro? ¿Por que desconfía tanto de sus
devotos?¿Por qué necesita
amenazarlos para que lo obedezcan? Hablando en vivo y en directo,
o por boca de los profetas, advierte:
Si no obedeces a la voz de Yhavé, tu Dios,él te herirá de tisis, de fiebre
, de inflamación, de gangrena, de aridez. Desposarás una mujer
y otro hombre la hará suya. Polvo y arena serán la lluvia de tu tierra.
Echarás en los campos mucha semilla, pero la asolará la langosta.
Plantarás viñas pero no beberás vino, porque el gusano las devorará.
Os ofreceréis en venta a vuestros enemigos como esclavos y esclavas,
pero no habrá comprador.(Deuteronomio)
Durante seis días se trabajará, pero el día séptimo será sagrado para
vosotros, día descanso completo en honor de Yhavé.
Cualquiera que trabaje en ese día morirá.(Éxodo)
Quien blasfeme en nombre de Yhavé será muerto. Toda la comunidad
le lapidará.(Levítico)
Más eficaces son los castigos que las recompensas. La Biblia es un
catálogo de espantosos castigos contra los incrédulos :
Soltaré contra vosotros las fieras salvajes. Os azotaré siete veces
más por vuestros pecados. Comeréis la carne de vuestros hijos,
comeréis la carne de vuestras hijas. Desenvainaré la espada contra
vosotros.Vuestra tierra será un yermo y vuestras ciudades una
ruina. (Levítico)
Este Dios siempre enojado domina el mundo de nuestro tiempo
por medio de sus tres religiones. No es un Dios muy amable,
que digamos.
¡Dios celoso y vengador, Yhavé , rico en ira! Se venga de sus adversarios,
guarda rencor a sus enemigos. (Nahum)
Sus diez mandamientos no prohiben la guerra. En cambio, Él manda hacerla.
Y es la suya una guerra sin piedad por nadie, ni siquiera por los bebés:
No tengas compasión del pueblo de Amalec. Matarás hombres y mujeres, niños
y lactantes, bueyes y ovejas, camellos y asnos…(Samuel)
Hija de Babel, devastadora: ¡Feliz quien agarre a tus pequeños y los estrelle
contra la roca!(Salmos)

Eduardo Galeano. Espejos. Una historia casi universal

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *