—No se preocupe. Todo saldrá bien —dijo el Verdugo.
—Eso es lo que me preocupa —respondió el Condenado a muerte.
—No se preocupe. Todo saldrá bien —dijo el Verdugo.
—Eso es lo que me preocupa —respondió el Condenado a muerte.
Esperaba en el rellano de Suárez que bajara el Presidente de sus habitaciones privadas. La escalera cubierta por una gruesa alfombra […]
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En el clima del relato que se respira en la historia de Earl y Doreen, se advierte la vida decadente de la […]
De pronto, todas las cabezas desaparecieron. Abrió más los ojos. Trató de perforar con la mirada la luz de los reflectores implacables. […]