Sólo le quedaba un cigarrillo. Se palpó el bolsillo y allí estaba, dentro del paquete blando y arrugado. Siguió escrutando la negrura, adivinando posibles signos de hostilidad entre las sombras. Trató de serenarse, pero el deseo irracional le perturbaba más y más. Miró el reloj; las 05:02, no tardaría en […]